¿Por qué a todo buscarle un por qué?

En una conversación con un amigo tratando de resolver los problemas existenciales de esta vida mía y en una de sus celebres conclusiones, llegó a la sana reflexión de que “el no saber qué se quiere” es un simple problema del género. Las mujeres más allá de ser complicadas y busquillas en todos los temas y ámbitos que nos competen, siempre le buscamos la quinta pata al gato y no vivimos en una tranquilidad mental constante. 

Estas musas que hemos inspirado a grandes mentes masculinas siempre le buscamos el por qué o el para qué a todo, si tenemos soluciones simples en la punta de la nariz buscamos cualquier detalle para hacerlo complicado, y es porque nuestra mente trabaja más de lo que debiera, hilamos demasiado fino en algunas situaciones y complicamos todo. El auto boicot es parte inherente a nosotras, somos nuestras más grandes enemigas y al parecer no nos gusta vivir tranquilas.

En este minuto creo que tengo todo a lo que podría aspirar para vivir una felicidad en tranquilidad, pero busco los por qué, no quiero estar alejada de mi hogar, no quiero amar y arrepentirme, no quiero sobreproteger y después lamentarme por mis desgracias. Y a pesar de que seguramente no soy la única en cuestionamientos, miro a mi alrededor y veo que toda la gama femenina que me rodea está pasando por la misma situación, nada nos conforta ni nos da esa racionalidad que tienen los benditos hombres, no queremos al parecer estar tranquilas con nuestras ideas, pensamientos y sentimientos. 

“Ser quien quiero ser” parece ser una consigna sólo de publicidad, porque a pesar de todo lo bueno siempre buscamos un por qué. Es así que una vez  más he llegado a la conclusión de que quiero ser libre y vivir en un lugar que no me pertenece, quiero no hablar y que todo se resuelva de manera sencilla, quiero ser la profesional que todos esperan, pero más que nada y cual poeta callejero quiero perderme en tus ojos y creer que todo lo que veo en ellos es verdad. Una vez más quiero tantas cosas pero por cobardía o por apego al género no quiero solucionar.